Gilberto Salazar Young engaña a amiga pese a que atraviesa por un terrible momento.
Gilberto Salazar Young, a quién considere un “amigo” por más de 10 años, me pidió contratarlo para que se hiciera cargo de mi negocio.
Ya que después de que mi esposo falleciera y perdiera a mi bebé (tenía 5 meses de embarazo) a causa del COVID, me tuve que mudar de Cancún a Mérida.
Cabe señalar que antes de que pasara todo esto, Gilberto nos ofreció legalizar nuestro auto en Chetumal y nos cobró $30 mil pesos.
Pasa lo de mi esposo y como no estábamos casados legalmente, además de que no dejo nada por escrito; le pregunté si se podía hacer el cambio de propietario y me cobro 4 mil pesos.
Para agilizar el trámite, una licenciada del DIF podía hacerme una carta de concubinato y me cobro $8 mil pesos.
Después de eso y aprovechándose de la amistad, Gilberto Salazar Young me pidió prestado $32 mil para un negocio que estaba empezando en Chetumal.
De regreso a Mérida
Después de la perdida tan grande que tuve, en enero regrese a Mérida y se quedó a cargo de mi taller.
El acuerdo era que yo contactaría a los clientes a través de la página, mientras que él iría a tomar medidas y recoger anticipos.
Para abril comencé a sospechar cosas, porque de repente había muchas cotizaciones y nada de ventas, me pedía mucho para gasolina y encontré una nota de venta donde le borro mis datos.
Además de que cuando iba a mi taller veía que me faltaba material y supuestamente no había nada de trabajo.
Tampoco me entrego los papeles del carro, ni la carta de concubinato y solo me estaba dando largas; así que le pedí que mejor me regresara el dinero.
Un día, un primo que me ayudó a entregar un trabajo y el cliente le contó que Gilberto Salazar Young quería que le depositará el anticipo a una cuenta Banamex y la mía es BBVA.
También le comentó que se había comportado muy insistente, lo que lo hizo desconfiar; sin mencionar, que cuando le pidió que le cotizara un espejo, le recomendó que se lo comprara directamente a él.
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Con las evidencias en mano
Fui a Cancún a confrontar a Gilberto Salazar Young y me negó todo, así que le pedí que me firmará un pagaré dónde se comprometía a pagarme el día viernes de esa semana, pero no cumplió.
Fui la siguiente semana a buscarlo y me dijo que me pagaría tan pronto recibiera el dinero de una demanda que ganó. Y en otra ocasión se fue al verme y no quiso hablar conmigo.
Para colmo me empezaron a hablar clientes que lo contrataron, le dieron anticipos y no cumplió con el trabajo. Y yo no tenía conocimiento de nada, porque él me decía que no aceptaban las cotizaciones.
Por si fuera poco, miente diciendo que no puede ir por qué su hija estaba grave en el hospital.
A mi hermana le debe $17 mil pesos, al aluminiero le debe $6 mil pesos y al proveedor de aluminio le quedo a deber $3 mil pesos de material. Y sé que le debe a su mamá y así sobrina.
Si tú conoces la ubicación de Gilberto Salazar Young, contáctanos a la brevedad y déjanos saber cuáles son sus nuevos planes.